RESPUESTA SEXUAL EN LA HEMBRA
La respuesta sexual fue estudiada y descrita de manera didáctica por William Masters y Virginia Johnson (1966), señalando que existe un ciclo que posee cuatro fases; cada una de ellas con cambios objetivos característicos que se suceden en progresión. Estas fases son:Excitación, Meseta, Orgasmo y Resolución.
Fase de
excitación: la excitación es consecuencia de
la estimulación sexual. La primera señal de excitación sexual en la mujer es la
aparición de LUBRICACIÓN que se
inicia de 10 a 30 segundos después del estímulo sexual. Aumento del aporte
sanguíneo de la pelvis y región perineal, debido a la vasodilatación de los
órganos que contiene. Se produce erección del pezón. Aumenta el tamaño y
consistencia del clítoris. En esta fase tiene lugar un periodo vasocongestivo
inicial encargado de producir húmeda vaginal y expansión de la misma que
denominamos FASE DE
LUBRICACIÓN-HINCHAZÓN. Además de dilatación hay alargamiento del 25 %
fundamentalmente en los 2/3 tercios internos de la misma.
Fase de meseta: esta fase dura 30 segundos a 3 min. En un 75% de las mujeres puede apreciarse un rubor sexual en la piel y en las mamas que comienza en el epigastrio que se extiende hacia la cara, el cuello y la frente. En las mamas un aumento de tamaño de 25% así como de las areolas mamarias. La vagina continúa la secreción aunque con menor intensidad que durante la fase de excitación. Y el cérvix y el útero se desplazan hacia arriba, creando un receptáculo anatómico para el líquido seminal en la pared posterior de la vagina. Al final de esta fase de meseta el desplazamiento uterino alcanza su grado máximo.
Fase de meseta: esta fase dura 30 segundos a 3 min. En un 75% de las mujeres puede apreciarse un rubor sexual en la piel y en las mamas que comienza en el epigastrio que se extiende hacia la cara, el cuello y la frente. En las mamas un aumento de tamaño de 25% así como de las areolas mamarias. La vagina continúa la secreción aunque con menor intensidad que durante la fase de excitación. Y el cérvix y el útero se desplazan hacia arriba, creando un receptáculo anatómico para el líquido seminal en la pared posterior de la vagina. Al final de esta fase de meseta el desplazamiento uterino alcanza su grado máximo.
Fase
orgásmica: se caracteriza por las
contracciones intermitentes de la musculatura lisa de los órganos genitales
como la esquelética. En la mujer la respuesta sexual culmina con el orgasmo,
que consiste en contracciones reflejas involuntarias y rítmicas de los músculos
y tejidos que rodean el introito vaginal y también algunos músculos pélvicos. En contraste con el orgasmo masculino, el orgasmo femenino tiene una sola fase.
Fase de
resolución: ésta es una fase de duración
variable y depende de la evolución de las fases anteriores. Representa una
inversión fisiológica del proceso, pasando por las fases de meseta y de
excitación hasta llegar al estado de no estimulación sexual. No hay periodo refractario.
En el
ciclo sexual también existe un marcado componente extragenital que afecta a
diversos órganos y sistemas. Hay aumento de la presión arterial, frecuencia
cardiaca y ventilación pulmonar que alcanza su máximo en el orgasmo, decayendo
tras el mismo.
También se
ha encontrado cambios de los niveles plasmáticos de hormonas, siendo lo mas documentado
los aumentos de vasopresina durante la excitación, de oxitocina durante el
orgasmo y de prolactina tras el mismo, así como el aumento difuso y sostenido
de adrenalina, gonadotropinas y testosterona asociado a la actividad sexual.
Otros
autores han estudiado el componente anatomo - hormono – neuro - vásculo -
endotelial subyacente, el cual es responsable de los cambios objetivos que
fueron descritos en el ciclo sexual por William Masters y Virginia Johnson.
Cabe destacar que ellos no incluyeron el Deseo dentro de la Respuesta Sexual.
El modelo Helen Kaplan (1974) Helen Kaplan (1974)
describió el ciclo sexual de tres fases: Deseo, Excitación y Orgasmo,
incluyendo el Deseo dentro de la respuesta sexual.
Wagner (1981),
describe cuatro fases del ciclo erectivo: Fase de Reposo, Fase de Tumescencia,
Fase Erectiva, Fase de Detumescencia o restitución pudiendo esta última ser:
rápida o lenta.
Whipple y Mc.
Greer (1997) propusieron como paradigma un continuo que se inicia con el deseo,
seguido de la excitación, la meseta, el orgasmo y la resolución,
correlacionando éstas con la seducción (que corresponde al deseo), las
sensaciones (que coinciden con la excitación y meseta), la entrega (que se
corresponde con el orgasmo) y la de reflexión (con la resolutiva), que de ser
positiva esta última, incitará a iniciar o buscar la seducción nuevamente,
reiniciándose así el ciclo sexual.
Basson (2001)
presenta un Modelo alternativo del Ciclo de Respuesta Sexual que inicia con la
intimidad emocional, la cual “motiva la sexualidad” en la mujer neutra, al
recibir el estímulo sexual -que está dominado por factores psicológicos y
biológicos- que conlleva a estimulación sexual, el que a su vez, conduce a la
excitación y deseo sexual desembocando en satisfacción emocional y física, la
cual puede llevar a mayor intimidad emocional o al reposo.
Diferencia de la respuesta sexual en el varón y la hembra
Bibliografía
Cabero L, Tratado de Ginecología y Obstetricia. Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia. Editorial
Panamericana. Segunda edición. Tomo 1. 2012. Madrid España.
Manual de diagnóstico en Sexología. (MSD). Tercera
edición. 2014. Capitulo I. Páginas 61-89.
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